Qué son las várices y cuál es su tratamiento
La enfermedad venosa de miembros inferiores conocida también como várices es una afección común en nuestra sociedad y afecta sobre todo a adultos y adultos mayores que por un estilo de vida sedentario, obesidad, alcoholismo o tabaquismo han perdido la salud vascular.
Cómo se forman la várices
En condiciones normales, las venas tienen válvulas que funcionan como compuertas unidireccionales, permitiendo que la sangre fluya hacia el corazón y evitando que retroceda. Sin embargo, en el caso de las várices, estas válvulas se debilitan o se dañan, lo que provoca un flujo sanguíneo inadecuado y un aumento en la presión dentro de las venas. Como resultado, las venas se ensanchan y se vuelven visibles bajo la piel.
Esta afección conlleva a un aminoramiento de la capacidad circulatoria de las venas, inicialmente se pueden observar las telangiectasias o arañitas vasculares y mientras va avanzando el mal se podrá observar un engrosamiento y mayor visibilidad de las venas hasta convertirse en formas de troncos que normalmente sobresalen en las paredes laterales de las piernas.
No obstante, muchas veces las várices son internas y no visibles por lo que el especialista más adecuado, el Cirujano Cardiovascular, deberá proceder siempre con la ayuda del eco doppler venoso para conocer el estado interno de las piernas.
El tratamiento de las várices
Como ya lo hemos indicado la primera acción que realiza el Cirujano Cardiovascular especializado en várices es realizar una evaluación con el Eco Doppler Venoso. Con la ayuda de la visualización interna de las venas el médico determinará la gravedad de las venas e indicará un tratamiento para las várices entre los que se tiene:
Aunque no existe una cura definitiva para las várices, existen tratamientos eficaces que pueden aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de quienes las padecen.
Tipos de Várices
Las várices pueden variar en su apariencia y gravedad. Van desde las telangiectasias, que son venas pequeñas y rojas, hasta várices más complejas que se presentan como cordones sobresalientes bajo la piel. Además, las personas con várices pueden experimentar síntomas como dolor, picazón, sensación de piernas cansadas, hinchazón y calambres.
Uno de los tipos más graves de várices es la insuficiencia venosa crónica, que puede llevar a complicaciones como úlceras venosas en la piel y trombosis venosa profunda si no se trata adecuadamente.
Tratamientos para las Várices:
Cryo Escleroterapia (CLaCS): Este método consiste en la aplicación de una solución criogenizada que en conjunto con el láser permitirá que desaparezcan las arañitas vasculares.
Ablación Térmica con Radiofrecuencia: Este método consiste en el cerramiento de la vena safena mayor mediante el proceso de ablación térmica. Se indica este tratamiento cuando las várices son de mayor gravedad y complejidad.
Es importante señalar que los tratamientos mencionados son ambulatorios, es decir el paciente puede salir caminando luego de los mismos. Además es necesario comprender que si bien no existe una cura definitiva para las várices, el tratamiento de las mismas es necesario para aliviar los síntomas y evitar la complicación de la enfermedad venosa que puede conllevar en mayores grados a la aparición de la úlcera varicosa.
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